jueves, 4 de noviembre de 2010

FRAGMENTOS DE "SUCEDIÓ EN OTOÑO", DE LISA KLEYPAS

—Tengo un temperamento de lo más horrible —reconoció Lillian satisfecha—. Y soy capaz de mal decir como un marinero.

"Es obvio que eres atractiva, inteligente y que, sin lugar a dudas darás a luz unos niños sanos. Por no mencionar los beneficios que conllevará una alianza entre nuestras familias." MARCUS A LILIAN.
"Supongo que el matrimonio tiene ciertas ventajas, como tener a una mujer a mano para satisfacer tus necesidades, por no mencionar el hecho de que tener una esposa resulta mucho más barato que mantener a una amante". MARCUS.
" Señorita Bowman. Ni la mismísima reina Victoria conseguiría inculcar respetabilidad a un par de mocosas salvajes como usted y su hermana. Es imposible." MARCUS.
—Vaya, gracias —dijo ella no sin cierta ironía—. Me das permiso para montar dos días antes de que acabe la fiesta. ¿Por qué ahora? ¿Porque me acosté contigo anoche?
Una sonrisa lánguida cruzó los labios del conde y su mano se movió a hurtadillas sobre la cadera de la joven.
—En ese caso, tendrías que haberte acostado conmigo hace semanas. Te habría dado el control total sobre la propiedad.
Lillian se mordió el interior de las mejillas para evitar devolverle la sonrisa.
—Comprendo. Veo que en este matrimonio me veré obligada a intercambiar favores sexuales cada vez que quiera algo de ti.
—En absoluto. Aunque... —Un brillo travieso le iluminó los ojos-... no cabe duda de que tus favores hacen que mi disposición mejore notablemente.
LILIAN Y MARCUS.